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Un techo que habla del mar

Tejidos en movimiento que transforman un comedor en una experiencia sensorial

En el restaurante del hotel Ona Palamós, el proyecto de decoración textil nació con una clara intención: capturar la esencia del mar y llevarla en el interior. Gracias a una instalación de tejidos colgantes al techo, con una delicada ondulación y en tonos azules y blancos, el espacio se transforma en un lugar lleno de luz, frescura y movimiento. Esta propuesta, diseñada y ejecutada conjuntamente con la decoradora Laura García, busca más que decorar: busca emocionar.

El téxtil como protagonista de la experiencia

Los tejidos no solo cumplen una función estética, sino que también condicionan el ambiente y la percepción del espacio. En el Ona Palamós, el juego de luz con las teles aporta dinamismo en el comedor y genera una atmósfera que invita a la calma y a la contemplación. Acompañados por lámparas de mimbre y materiales naturales, los tejidos acaban de redondear un espacio coherente con el paisaje y el estilo de vida de la Costa Brava.

Un trabajo compartido, hecho con intención

Este proyecto ejemplifica el valor del trabajo en equipo y de las propuestas hechas a medida. Con una mirada detallista y una gran sensibilidad estética, hemos podido sumar funcionalidad y belleza para ofrecer una decoración memorable. Porque cada proyecto que hagamos busca conectar con el espacio y las personas que lo habitan.

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